sábado, 17 de junio de 2017

Hasta aquí

Después de ocho meses... esto ha acabado.

Tras discutir con Julián sobre el posible futuro bebé, hemos decidido dejarlo.

No sé del todo cómo me siento, porque... por una parte me siento mal y por otra, bien, ya que ahora sé que él puede estar con alguien mucho mejor, que le pueda dedicar tiempo y le haga más feliz.

Pero... sé que no encontraré a alguien como él, alguien con quien tener tanta confianza y... puede que acabe muriendo sola, pero creo que es lo que me merezco, y... aunque todavía no sé cómo va a evolucionar el supuesto bicho... creo que ya tengo claro qué hacer con él, a ver si puedo hacer algo bueno, por una vez en mi vida.

Han sido ocho meses de besos fugaces en el pasillo, de posar mi cabeza en su pecho y cerrar los ojos, de besar sus heridas cuando fue necesario y de dejarme guiar entre los árboles del parque... nunca podré olvidar su olor ni su tacto, y este error me perseguirá toda la vida, pero tampoco me arrepiento, se merece a alguien mucho mejor, pero, aún así, me duele.

Julián, si algún día llegas a leer esto... yo he malgastado mi tiempo con un montón de gilipollas, no hagas tú lo mismo.

Por ser rata

La semana pasada me dieron las notas de las recuperaciones, todo aprobado, así que... muy bien, estoy muy contenta, y daría saltos de alegría si no fuera porque...

Mis padres has cogido vacaciones en el trabajo para dos semanas completas, lo que significa que tengo que ir al instituto en bus, y como soy muy rata, vuelvo andando para ahorrarme algunos céntimos, pero resulta que... como he tenido que caminar tanto, de un lado para otro, he sufrido una inflamación en la planta del pie, en la zona superior del hemisferio izquierdo, conocida popularmente como metatarsalgia, entre los metatarsianos primarios y secundarios, pero es que ahí no se queda la cosa, porque resulta que la inflamación es tan grande que ha comprimido los músculos y los nervios adyacentes, y me está provocando un dolor insoportable, de hecho, llevo tres noches sin poder dormir por los dolores intensos, y hoy, he decidido acercarme al centro de salud del pueblo, ya que estoy en León porque mis padres me obligan, y después de un intercambio animado de opiniones con la médica, muy maja, por cierto, hemos llegado a la conclusión de la metatarsalgia, me ha recetado un antiinflamatorio y... Estoy en silla de ruedas para no forzar los músculos ni los tendones.

Yo quería una azul muy mona... Pero me ha dado una gris sosa que tengo que mover yo, y tengo los brazos destrozados... Pero el antiinflamatorio me ha hecho efecto así que... me doy por satisfecha, y me quitarán la silla cuando nos vayamos, tendré que aprovechar para descansar, reposar, y hacer un poco el tonto con ella.

Ahora, sólo me queda preocuparme por una cosa: No me baja la regla. El martes, si estoy bien, iré a la farmacia a por un test de embarazo.

lunes, 5 de junio de 2017

Miedo al embarazo no deseado

Desde que soy muy pequeña, mis padres me han metido en la cabeza que el sexo es algo malo, demoníaco, algo sólo para mayores con una pareja estable, y empiezo a pensar que pueden tener razón.

Siempre he tenido un pánico terrible a quedarme embarazada, y no es una preocupación ligera, no, llega al punto de ser algo totalmente obsesivo, de revisar concienzudamente los preservativos, no quitarme la ropa para evitar roces desafortunados, evitar la penetración todo lo que pueda... Y un sin fin de medidas que parece que sólo yo utilizo.

Me sorprende mucho no encontrar en Internet experiencias similares de chicas o de chicos que temen tener relaciones sexuales completas para evitar un posible embarazo no deseado, ya que creo que es lo peor que le puede pasar a una pareja joven, que todavía no ha acabado los estudios y no es económicamente independiente.

Mi miedo llega a tales extremos que, hace unos meses, la regla me llegó quince días después de lo que había previsto, creo que fue por estrés en el instituto, y menos mal que no había hecho absolutamente nada esos meses, porque sino, a saber la que hubiera podido liar, pero, aún así, me llegué a plantear un embarazo, algo totalmente ilógico, ¿Quién me iba a preñar? ¿El espíritu Santo? Pero aún así... lo pensé.

La verdad es que no tengo miedo a el embarazo en sí, cuando tenga una independencia económica, un trabajo estable y una familia fuerte, igual me lo podría plantear, y no creo que sufriera estrés por ello, ya que sería algo planificado, pero ahora... prefiero repetir mil veces curso.

El caso es que... igual es cierto que el sexo es sólo para adultos responsables y por eso tengo ese miedo tan atroz, quizá no esté preparada para hacer frente a lo que el sexo conlleva, pero... No sé, me encantaría encontrar por ahí historias de personas que sufran de lo mismo, y que cuenten cómo lo superaron, si es que lo hicieron, pero no encuentro nada, y los consejos que se encuentran son los de siempre: "Si se usan métodos anticonceptivos de forma adecuada, no habrá problemas" ya, claro, pero puede haber un condón defectuoso, o que, en cualquier momento te rozaste, o que el condón se quedara dentro sin querer o... miles de cosas, ya sé que es buscarle las cinco patas al gato, pero es que no tengo explicación para esto, sé que es absurdo, pero es algo que me mata y no sé si será cosa de madurez, pero me está jodiendo la vida.