domingo, 3 de septiembre de 2017

Pues nada, otro fantasma

Son las 8:49 de la mañana de un domingo en verano, ¿Qué hago despierta? Sucumbir a los caprichos de un nuevo fantasma en la casa de campo.

Resulta que hace nada, estaba yo tan feliz durmiendo, ¿Sabes? Cosa que me gusta hacer un domingo por la mañana teniendo en cuenta que no tengo ninguna obligación y que me acosté a las 4:30 de la madrugada.

Pues bueno, de repente, se encendió la televisión de mi cuarto, a todo volumen, y me despertó. Al principio, pensé que se trataba de  algo que estaría haciendo presión sobre el mando, pero, tras apagarla yo misma con el mando, y volver a intentar dormir, la televisión se vuelve a encender sola, y así repetidas veces, cada vez que se enciende, el volumen se pone al máximo, así que tengo que estar atenta porque como mi madre o mi padre se despierten... me va a caer una...

Por lo menos, están poniendo Shin Chan.

He pensado en que podría ser un corte de luz, pero no, la radio sigue apagada, así que no es eso. Una solución sencilla sería desconectar la televisión, pero es que... como la desenchufe, y se vuelva a encender sola... no me queda pueblo pa correr.

No hay comentarios:

Publicar un comentario