viernes, 26 de febrero de 2016

Liada máxima. ¿S^2?.

Ayer, 24/2/16, quedé con Sara.

La conocí hace más o menos un año, cuando le pedí a Joaquín un contacto homosexual pa pasar el verano, la historia estará en otra entrada que debo de tener publicada hace ya algún tiempo.
Bueno, el caso es que nunca había logrado quedar con esta chica, siempre pasaba algo súper inesperado en el último segundo. Ya lo había intentado siete veces y nada, hasta que me harté y se lo dije. Quería verla, y me daba igual lo que pasase después. Ella dijo que el 24 tenía que quedar con un paisano para que le diera una máquina de escribir (No pregunté para qué la quería. Tampoco quiero saberlo) y que después de eso podría verme, así que no me lo pensé dos veces y acepté la propuesta.

Ese día, me levanté con un dolor enorme en los riñones, no logro recordar haberlo tenido antes, y créeme que fue pa recordar... me pensé seriamente no ir a la escuela, pero na, al final fui, tenía gimnasia a primera, y pensé que el ejercicio me vendría bien para despistar el dolor. Milagrosamente, salió bien, y durante toda la mañana, solo tuve un molesto dolor constante, pero nada grave.

Llegó la tarde y la hora de ir a verla, el dolor persistía, pero me negaba a tener que cancelar otra cita... hice todos los deberes lo más rápido que pude y enseguida estaba lista para salir, pero me faltaba una cosa, mi ropa. La noche anterior había colocado en una percha mi conjunto favorito, y ahora no estaba ni la percha ni la ropa, total que fui a preguntarle a mi madre si la había cambiado de lugar (Manía desesperante que tiene) y me dijo que la había metido en la lavadora... y yo como... ¿En serio? Vamos a ver... dejo toda la ropa tirada por el suelo, por mi cuarto a penas se puede ver el suelo, ¿Y vas y pones a lavar lo único que no estaba arrugado, sucio o viejo? Di que si bonita, que el echo de que me haya tomado tantas molestias poniéndolo en una percha, justo después de haberlo planchado, significa que tienes carta blanca para lavarlo... bueno, nada, me puse otra ropa. 

Salí de casa con media hora de antelación. Quedamos "Donde los institutos" eso son dos institutos que están prácticamente pegados, separados por un semáforo, y claro, ¿Dónde quedamos exactamente? Porque institutos hay dos... estuve dándole vueltas de la que iba de camino y como ella va a uno de los institutos, decidí esperarla enfrente del semáforo que separa ambos edificios, en la zona de su instituto.

Para colmo de males... empezó a llover.

Estuve bajo la lluvia como unos seis minutos, deseando que apareciera de una vez, pero en cuanto la vi, deseé que desapareciese, porque sentí que todo el mundo se rompía, y yo con él. Pasó delante de mi, cargando con un maletín negro y se puso a cubierto de la lluvia bajo un pequeño tejadillo que había por fuera del edificio. Enseguida me llegó el mensaje de que ya estaba allí, y no pude hacer otra cosa que encaminarme hacia ella, cuando estoy a solo unos pasos, le mando un mensaje diciendo que ya la veía, prediciendo sus movimientos. Supuse que se giraría y se quedaría mirándome, y odio cuando pasa eso, siempre que quedo con alguien procuro mirar hacia la parte opuesta de donde creo que puede venir para no tener que quererme mirándole. Ella sonrió y salió del tejadillo, me saludó con la mano, pero no tenía ni idea de qué decir, y perecía que ella tampoco, así que nos quedamos como unas tontas mirando una para cada lado, bajo la lluvia, hasta que me cansé y me metí debajo del tejadillo, pero ella seguía sin moverse, así que suspiré y la agarré de la mano, para poder tirar de ella y subirla a donde yo estaba.

Una vez así, no podía dar marcha atrás, así que tiré pa delante y le di un beso en la mejilla, super suave y fina, que enseguida cambió de color y se tiñó ligeramente de rosa. No pude evitar sonreír y avancé por su rostro con pequeños besos hasta llegar a su boca.

Y bueno na, nos estuvimos dando picos un buen rato. Me gustaba su olor, una mezcla de fresas y gominolas, y sus labios eran suaves y tiernos, pero va, quería más, y poco a poco fui haciendo que abriese su boca, hasta que logré que la dejase lo suficientemente abierta como pa dejarme entrar, y ahí iba yo, to ilusionada pero... ella había escondido su lengua lo más al fondo que podía, y tuve miedo de haberla obligado a besarme, así que solo pude reírme y apartarme, por suerte, ella también se rió y me dijo que llevaba como sies meses sin liarse con nadie... bueno, seguimos besándonos, la mejor forma de mejorar en algo es practicando, y justo cuando me separo algo de ella, aparecen dos chicas, que la saludan y siguen su camino sin pararse. Yo estaba de espaldas, así que ni las vi, pero algo me dijo quién era, y no pude evitar preguntarle cómo se llamaba una de las chicas. Por desgracia para mi, mi corazonada fue acertada, la chica era Marina (Una historia muy larga que ya subiré... si tengo ganas y tiempo libre) al parecer se conocen y se llevan bien, y no pudo evitar preguntarme que qué pasaba con Marina, le dije que ya se lo explicaría algún día, y que no preguntase a nadie, porque ya estaban todos avisados de que era tema prohibido. Lo bueno de ese momento fue que pudimos hablar un poco, cosa que me encantó, porque siempre me ha costado hablar con la gente y no quería llevar otra relación en la que ninguno hablase.

Y poco más, dos besos más y nos separamos.

Vale, la liada viene al día siguiente, cuando en el recreo, mi hermano me pregunta si me tuve que poner de puntillas para besarla, y yo me reí y le dije que no, y me dijo que eso era imposible, que Sara era muy alta, una torre. Yo me quedé mirándole en plan... no tío... como mucho medio palmo más que yo, y él se quedó blanco y me dijo que no podía ser. Entonces, empecé a darle vueltas a los acontecimientos y había un par de cosas que tampoco cuadraban: Sara me dijo que hacía seis meses que no se liaba con nadie, pero es que hace dos semanas, mi hermano le había preguntado si tenía novia, y ella le respondió que justo ese día había cortado con su novia... y, la otra cosa es que Sara, en el momento en el que logramos entablar una pequeña conversación, me preguntó que quién era Alex (Mi hermano) que todos le conocían menos ella, en ese momento no le di importancia, pero ahora... a ver, mi hermano habla con mucha gente, pero no creo que se ponga a preguntar cualquier cosa a una desconocida... Oportunamente, recordé que Sara tiene una hermana pequeña, de unos trece o catorce años... que en su tiempo, había logrado ver gracias a Lucía que me pasó una foto de Sara y su hermana, y a ver... se parecen algo, no como si fueran gemelas, pero se ve que son familia... y lo peor de todo fue que mi hermano actualizó la foto de nuestro grupo de Wass, en el que tenemos un collage con las fotos de todos nuestros amores platónicos, y me puse a comparar la foto de Sara con el recuerdo que tenía de aquella tarde y... buff se parecen... como si fueran parientes...

Dios mio... es que me puedo morir... ¿Con quién me he liado yo? Madre de dios... ante este gran problema, mis compañeros y yo hemos elaborado las siguientes teorías por las cuales, la chica con la que me lié yo aquella tarde, podía ser Sara:

-Se puede mantener una relación con alguien sin liarse, por lo cual, podría haber cortado con esa persona sin haber hecho nada.

-Sara se había olvidado de quién era Alex

-Sara era más baja porque la lluvia encoge (?)

Votos no secretos:

Me he liado con Sara: Joaquín y Lucía

Me he liado con la hermana de Sara: Chincheta, Alex

Bufff como puedes ver... mucho sentido estas suposiciones no tienen, pero es a lo único a lo que me puedo agarrar para no pensar que me he comido a una cría de catorce años... mi pequeña teoría es que estaba tan entusiasmada por el momento que no visualicé bien a Sara, por dios, que sea eso!




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